Ayer sepulte los últimos buenos momentos
Los eche la tierra donde yacerán siempre
Hoy estoy velando al corazón,
El mismo que con tus propias manos asesinaste
No hay más…
Solo tus desprecios y esa indiferencia
El dio lo que tenia, ¡no basto!
No basto el sacrificio y el amor,
Que se olvidara de todos y solo fuera para ti
No basto que se desnudara y se entregara pleno
Nada de eso sirvió
Al final…
Tú lo traicionaste
Y junto a tu cómplice
Lo apuñalaste por la espalda
Desangrando callo en brazos del dolor y murió
Y con el mi amor.
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