viernes, 3 de mayo de 2013

Licantropos


He probado la sangre de tus labios
Me he llenado de tu aire los pulmones
Llevo la marca del lado obscuro
El tatuaje de tus deseos más obscuros
Escritos en la carne cruda de mi cuerpo
Cauterizados por las mismas llamas del infierno
En donde camina mi cordura de la mano de tu locura
Hemos llamado a la luna
En un mismo aullido doloroso
El de dos licántropos en celo
Y nos apareamos bajo la luna teñida de sangre
Como dos bestias nos desgarramos
Bañados en los rayos ensangrentados de la luna
Saciados nos volvemos otra vez humanos
Y dejamos correr por la pradera desnuda
Nuestras almas de bestias

Por las calles de Jilotepec


Tanto Dejamos en esta ciudad,
En tantas cosas nos convertimos aquí
Sin embargo; Tan poco nos llevamos en los bolsillos
Hoy que el destino nos separa hemos entendido
Que en esas horas largas desnudas ante tu piel
Escribimos nuestros nombres en las calles de Jilo
Que  cada paso, era un beso directo al recuerdo
Que  cada momento era un paso sin retorno al olvido
Y camino por las avenidas sin rumbo fijo
Buscando entre la gente un suspiro al aire
Dibujando con mis manos tu silueta
Que camina por la acera sin tu presencia
Pero no hay más que los recuerdos
De aquellas mágicas tardes
No hay más que las tibias noches mojadas
En las que me transformaba en un lobo
Al acecho de una princesa dormida bajo la luna llena
Solo quedan  las miradas de despedida acechadas por los mirones
No hay más que una ciudad
Que huele a ti
Que sabe a ti
Que me siempre recuerda a ti.

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